El futuro ya llegó en el arte digital japonés

Un museo de Tokio propone una impresionante muestra de arte digital, con efectos visuales en tiempo real gracias al trabajo de 500 artistas, ingenieros y programadores. La extensión del concepto de belleza.
Fuente: AFP - 2018-05-09
La cascada baja a toda velocidad por una pared e inunda la sala. La situación que podría alarmar a cualquier desprevenido es, en realidad, una de las tantas ilusiones que propone el museo tokiota del colectivo japonés teamLab, conocido por sus espectaculares exposiciones de arte digital.

Un paseo bucólico en medio de un arrozal, otro entre lámparas, un tercero en medio de un océano de olas, y una degustación de un té verde aderezado con una flor virtual, son otras de las experiencias en las que el visitante puede sumergirse.

También se proponen actividades lúdicas, como caminar por colinas, volar por el espacio saltando de una especie de trampolín o moverse al ritmo de un centenar de bailarines con forma de siluetas traslúcidas. 

Sin fronteras

Se proponen cinco universos distintos, con obras que reaccionan al contacto del espectador y lo acompañan a lo largo del recorrido, fruto de complejos algoritmos.
"Me gustaría que este espacio fuese un lugar donde se pueda recordar que en nuestro mundo las fronteras no existen"
"Hemos creado un universo sin fronteras compuesto por obras de arte que se desplazan por sí solas, se comunican entre ellas y a veces se mezclan con otras", explica Toshiyuki Inoko, de 41 años, cofundador de teamLab.

"Me gustaría que este espacio fuese un lugar donde se pueda recordar que en nuestro mundo las fronteras no existen", agrega.

En 2001, Toshiyuki Inoko formó teamLab con unos compañeros de la universidad de Tokio tras estudiar ingeniería. Con una meta: "liberar el arte de las restricciones físicas" de los lienzos. 

"Creemos que el arte digital puede extender el concepto de belleza", resume teamLab en su manifiesto.

Pasaron diez años hasta que en 2011 el colectivo comenzó a dar verdaderos pasos artísticos en Taipei, antes de alzar el vuelo en 2014 integrando la galería neoyorquina Pace Gallery.

Un año más tarde, organizaron su primera exposición en Japón, que atrajo a medio millón de visitantes en cinco meses. De ahí dieron un nuevo salto al extranjero para dar a conocer su trabajo, en Londres, Silicon Valley y China.

TeamLab dio ahora un nuevo paso, con la creación de su propio museo en colaboración con la empresa inmobiliaria Mori Building, y con el apoyo de varios grupos japoneses, desde Panasonic a Epson, que suministran el sofisticado equipamiento.
El costo total del proyecto no se ha revelado pero trascendió que se necesitan entre 1 y 2 millones de dólares por obra digital.
Ultratecnólogos

Dicen que es "único" en el mundo. Se trata de un vasto espacio de 10.000 m² que reúne unas 50 obras en el barrio futurista de Odaiba, una zona de la capital  muy frecuentada por turistas.

Un total de 520 ordenadores y 470 proyectores lo convierten en toda una proeza tecnológica. Las obras no son "ni animaciones pregrabadas, ni imágenes en bucle", sino que están realizadas en tiempo real, insiste teamLab, gracias al trabajo de 500 “ultratecnólogos”, entre artistas, ingenieros, programadores, matemáticos, expertos en robótica y arquitectos. 

"El hecho de que el universo se transforme con la presencia del otro es muy importante para nosotros. Formo parte de la obra al igual que los otros visitantes", comenta Toshiyuki Inoko.

El costo total del proyecto no se ha revelado pero se necesitan entre 1 y 2 millones de dólares por obra digital, según pudo saberse. TeamLab no confirma estas cifras y afirma que "el montante puede variar considerablemente" entre una y otra. 

El edificio, llamado oficialmente "Mori Building Digital Art Museum: teamLab Borderless", abrirá sus puertas el 21 de junio. La entrada costará 3.200 yenes (24 euros, 28 dólares). La gran apuesta es atraer a un gran público de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020.