Chen Tsui-yu, un cirujano chino que vive en Buenos Aires, se hizo célebre de la noche a la mañana por haber curado con acupuntura china a una mujer que quedó paralítica a causa de un accidente automovilístico. Josefina Marino, a quien los médicos argentinos declararon totalmente incapacitada después de un accidente de tráfico hace casi dos años, dijo que "Dios estaba de por medio" cuando fue por primera vez a la clínica del Dr. Chen. Entonces estaba ciega, tomaba 26 píldoras diarias y "durante cinco meses, no pude dormir ni un minuto". "Ahora", dijo, "no solamente he visto a la vida, sino que también vivo mejor de lo que vivía antes del accidente". La mujer argentina dijo que el Dr. Chen también curó la miopía de su hijo de nueve años de edad, logró que a su cuñado le volviera a nacer el pelo y que su marido dejará a fumar en tan sólo tres días. Nativo de Kaohsiung, en el Sur de Taiwán , el Dr. Chen, de 52 años, se graduó de la Facultad de Medicina de Kaohsiung y obtuvo su doctorado en Medicina en Japón. Se especializó en cirugía ortopédica. En 1981, en Taipei, operó con éxito a una persona bisexual, convirtiéndola en mujer. El Dr. Chen dijo que su confianza en la acupuntura aumenta cada vez más. "Siendo un cirujano capacitado, quisiera decir que muchas enfermedades que la medicina occidental no puede curar, pueden ser curadas por la acupuntura", concluyó.