A primera vista, los jovencitos que estudian en el internado de Hailsham son como cualquier grupo de adolescentes. Practican deportes, tienen clases de arte y descubren el sexo, el amor y los juegos del poder. Hailsham es una mezcla de internado victoriano y de colegio para hijos de hippies de los años sesenta donde no dejan de repetirles que son muy especiales, que tienen una misión en el futuro, y se preocupan por su salud. Los jóvenes también saben que son estériles y que nunca tendrán hijos, de la misma manera que no tienen padres. Kathy, Ruth y Tommy fueron pupilos en Hailsham, y también fueron un juvenil triángulo amoroso. Y ahora, Kathy se permite recordar Hailsham y cómo ella y sus amigos descubrieron poco a poco la verdad. Y el lector de esta novela, utopía gótica, irá descubriendo con Kathy que Hailsham es una representación donde los jóvenes actores no saben que sólo son el secreto terrible de la buena salud de una sociedad. El autor nos presenta a pinceladas, por aquí y por allá, sin decirlo nunca realmente al principio, una sociedad de la post-guerra que ha descubierto la cura de las más peligrosas enfermedades, como el cáncer. Una sociedad retratada de los ojos de Kathy, que lleva once años siendo una buena cuidadora y se propone rememorar su estancia en Hailsham luego de haber deseado olvidar durante muchos años. Un donante le pregunta repetidas veces por Hailsham, intentando grabar a fuego los detalles de la vida en ese centro antes de terminar y es allí cuando Kathy se da cuenta de que, a su manera, ella, Ruth y Tommy, tuvieron suerte de crecer en Hailsham y después, de vivir en las Cottages.
El autor nos presenta a pinceladas una sociedad de la post-guerra que ha descubierto la cura de las más peligrosas enfermedades, como el cáncer.
En Hailsham se formaron los vértices de aquel triángulo que formaron ella, Ruth y Tommy durante toda su vida. Ruth, una muchacha vivaz, Kathy, algo más inocente e incrédula, y Tommy, con ataques de furia un día sí y un día también y con nulo talento para el arte… Sin embargo, a medida que el libro va avanzando, se forman esas preguntas en la mente del lector, ¿por qué los crían de esa manera?, ¿por qué les dan libertad sexual y les prohíben la nicotina?, ¿por qué se preocupan de manera exagerada por su salud? Kathy relata el día a día reflexionando sobre los sentimientos de ese momento. Sobre lo que influyó su crianza en su vida posterior, como cuidadora. Su manera de ver el mundo, de preguntarse porqué Madame, que les tiene miedo (cosa que comprueban ella y sus cinco compañeras de cuarto) se lleva sus obras de arte a «La Galería». ¿Por qué esa galería? ¿Para qué?
El Premio Nobel de Literatura Kazuo Ishiguro nació en Nagasaki en 1954, pero se trasladó a Inglaterra en 1960. Está considerado uno de los mejores escritores contemporáneos.
Y al final, cuando deja Hailsham y se marcha a las Cottages junto con sus dos mejores amigos, Ruth y Tommy, que ahora forman una pareja estable, se hace más notorio ese triángulo entre los sentimientos de cada uno y su forma de ver el mundo. Mientras que Kathy lo acepta todo tal y como es, sin pensar demasiado, Ruth se obsesiona con los rumores, con conseguir un aplazamiento antes de que tenga que volverse donante y completar… Kazuo Ishiguro retrata los miedos y temores de sus protagonistas en cada etapa de su vida, sin necesidad de metáforas, valiéndose únicamente de su prosa. Kazuo Ishiguro nació en Nagasaki en 1954, pero se trasladó a Inglaterra en 1960. Ha estudiado en las universidades de Kent y de East Anglia y en la actualidad vive en Londres. Está considerado uno de los mejores escritores contemporáneos. En 1995 fue nombrado Oficial de la Orden del Imperio Británico, y, en 1998, Caballero de las Artes y las Letras por el gobierno francés. Su obra ha sido traducida a más de cuarenta idiomas. Es autor de siete novelas – “Pálida luz en las colinas” (Premio Winifred Holtby), “Un artista del mundo flotante” (Premio Whitbread), “Los restos del día” (Premio Booker), “Los inconsolables” (Premio Cheltenham), “Cuando fuimos huérfanos, Nunca me abandones” (Premio Novela Europea Casino de Santiago) y “El gigante enterrado” – y un libro de relatos – “Nocturnos”. En 2017 fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura.