Taiwán acaba de lanzar una campaña diplomática internacional para reclamar un lugar en la asamblea de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que se realizará en mayo en Ginebra. “Nuestra exclusión plantea una amenaza al sistema alimentario y de salud global”, denunció el embajador en la Argentina Antonio Hsieh a través de un comunicado. Después de destacar que en Taiwán “la atención médica es considerada un derecho humano fundamental”, el diplomático consideró que la exclusión de Taipéi como observador de la 70ª Asamblea Mundial de la Salud (AMS), realizada en 2017, “viola los preceptos fundamentales de la Carta de la Asamblea General de la OMS”.
El embajador afirmó que Taiwán es una “pieza fundamental y ausente en el mapa sanitario global”.
“La OMS – explicó Hsieh - tiene el objetivo central de elevar los niveles de la salud humana a través de una cobertura de salud universal y necesita de la participación de Taiwán para establecer un sistema sólido de salud mundial. En Taiwán, el exitoso programa de seguro nacional de referencia global –NHI- permite a los usuarios acceder a una amplia gama de servicios a precios razonables. Desde la implementación del programa, la expectativa de vida en Taiwán se elevó de 74,5 a 80,2 años, una experiencia digna de ser compartida”. Taiwán participó desde 2009 de las asambleas de la OMS, pero en 2017 fue excluida por el organismo internacional, una determinación que sorprendió a las autoridades taiwanesas.
Taiwán es una “pieza fundamental y ausente en el mapa sanitario global”, destacó el diplomático.
Al respecto, el embajador Hsieh señaló que Taiwán es una “pieza fundamental y ausente en el mapa sanitario global”. Tras recordar las 2 millones de muertes anuales provocadas por la contaminación de la comida y el agua, consignadas en el reporte 2015 de la OMS, el diplomático destacó que “Taiwán comparte similitudes medioambientales con los países vecinos que pueden favorecer la transmisión de epidemias, como quedó evidenciado con la crisis de SARS (síndrome respiratorio agudo severo)”. “Situado en una posición clave en el este de Asia, Taiwán debería ser invitado a asistir a la próxima Asamblea en el año 2018”, concluyó.