Bajo un sol abrasador y con un calor tropical, los artesanos indonesios cortan madera, agujerean y martillan para fabricar los barcos tradicionales que surcan el archipiélago del sudeste asiático, haciendo perdurar un saber ancestral. La isla de Célebes (Sulawesi) es la cuna de la industria indonesia de esos barcos emblemáticos fabricados a mano. Se forjó la reputación de tener a los mejores artesanos y navegadores del país.
El proceso de fabricación se puede extender a un año, según el tamaño y características de la embarcación.
Algunas herramientas cambiaron, pero los artesanos conservan las tradiciones del pasado, rituales y oraciones se mezclan en la confección de las embarcaciones, elementos clave del proceso de fabricación de los "Pinisi" en Indonesia. Una vez que puede ser botado al agua, se sacrifica una cabra o una vaca para una última ceremonia de purificación. "El proceso de fabricación de un Pinisi puede tomar meses o incluso años según su tamaño", cuenta el artesano Muhamad Bahri Jafar en su taller de Tana Beru, a unos 175 km de Makassar, capital de la provincia de Sulawesi del sur.
Entre los rituales, se sacrifica una cabra o una vaca para una última ceremonia de purificación.
Los artesanos transportan sobre sus hombros largas planchas de madera para fabricar el casco. Esos barcos, cuyo peso puede superar las 200 toneladas, transportaban el pasado las especias comercializadas en el archipiélago de 17.000 islas e islotes. Actualmente siguen transportando madera y arroz, así como cemento, tejas, cigarrillos y motocicletas. Muchos de esos barcos tienen cabinas para dormir, cocinas, y están equipados para expediciones de buceo.