El premio Nobel de Literatura chino, Mo Yan, dijo en Chile que su conexión con Latinoamérica ha sido alimentada por los escritores de la región, cuyos relatos lo han remontado a las vivencias de su infancia en un poblado campesino del este de China. "A través de las obras literarias de Gabriel García Márquez y otros escritores empecé a conocer el continente latinoamericano, así que al llegar y conocer esta tierra, su gente y sus realidades, puedo entender aún más aquellas obras literarias", señaló el autor galardonado en 2012. Mo Yan participó en un diálogo con intelectuales chilenos, organizado por la Biblioteca del Congreso Nacional de Chile y el Centro Regional de Institutos Confucio para América Latina, con quienes habló sobre la rapidez con la que escribe sus libros, las influencias que ha recibido en su trayectoria y sus recuerdos de infancia en una familia de granjeros durante la Revolución Cultural (1966-1976). El autor aseguró ante unas cincuenta personas que "al leer a García Márquez me parece tan familiar lo que ha escrito, a mi vida, que aunque sean historias de Colombia me acuerdo de las vivencias en mi tierra natal".
"Los escritores tienen nacionalidad, pero la literatura no, porque todo lo que ocurre en América Latina también puede ocurrir en mi tierra (...) He podido descubrir tantas similitudes".
En esta línea, profesó que "los escritores tienen nacionalidad, pero la literatura no, porque todo lo que ocurre en América Latina también puede ocurrir en mi tierra (...) He podido descubrir tantas similitudes". El creador de "Sorgo rojo" (1987) explicó cómo sus padres le enseñaron a cuidar sus palabras y evitar hablar imprudencias, algo que encendió sus ganas de comunicar por medio de la literatura y que además derivó en su seudónimo. "Mi seudónimo es 'no hables', pero no dejo de hablar en ningún momento. Hablar a través de las obras es una de las mejores formas de hablar, pero frente a los fenómenos sociales, cuando un escritor opina debe tener prudencia", lo que no contradice la osadía o la valentía, dijo. El asiduo lector del poeta estadounidense William Faulkner afirmó que el sufrimiento de su niñez en el campo le ha servido de inspiración para las obras que primero piensa y luego escribe con prontitud. "Cuando tomo la pluma para escribir una novela es porque ya la tenía en la mente hace mucho tiempo, así que cuando me pongo a escribir es casi como un proceso de copia", sostuvo. Esto respecto de su libro "La vida y la muerte me están desgastando" (2006), que narra en 768 páginas la historia de un noble terrateniente asesinado. Una obra que le tomó al autor 42 años construir en su mente, pero solo 42 días en redactar.
Mo Yan se declaró un "conservador frente a la tecnología y la ciencia", a la vez que criticó la cantidad de chatarra electrónica que se produce en el mundo.
Aseveró que un buen escritor debe ser capaz de influir en la construcción y la evolución del lenguaje, por lo que uno de sus objetivos ha sido "domesticar y reformular" la lengua de los campesinos de su tierra "para volverlo comprensible a todos". Mo Yan habló sobre los avances actuales y se declaró un "conservador frente a la tecnología y la ciencia", a la vez que criticó la cantidad de chatarra electrónica que se produce en el mundo. Al fin del encuentro, el cineasta Jorge López señaló a Xinhua que "recibir las impresiones de un premio Nobel es fantástico, sobre todo para quienes estamos a la espera de que nuestras historias se compartan en China". El actual productor de un filme sobre la inmigración china a Latinoamérica en el siglo XIX recibió consejos de Mo Yan sobre "cuidar que haya emoción y un factor humano en los personajes chinos y latinoamericanos de la película", precisó López. Por su parte, el director y cofundador de Lom Ediciones, Paulo Slachevsky, rescató "la simplicidad y humildad" de Mo Yan, y su llamado a la "universalidad" de la literatura. "Es fundamental establecer puentes entre nuestras culturas. Hay mucho comercio con China, pero falta profundizar el intercambio cultural" y "establecer lazos, porque eso puede ayudar a un mundo de paz, de colaboración y no de competencias", señaló Slachevsky, cuya editorial ha traducido ocho obras directo del chino al español. Mo Yan fue condecorado como Doctor Honoris Causa por la Universidad Diego Portales, y este miércoles ofreció una entrevista televisiva en la sede del Parlamento de Santiago. El escritor chino, que nació el 17 de febrero de 1955 en Gaomi, de la provincia china de Shandong (este), es considerado uno de los más importantes referentes de la literatura china contemporánea. Sus obras destacan por la majestuosidad con que ofrece un panorama de la sociedad campesina de China a lo largo de su historia en el siglo XX.