Dos hombres se encuentran para comer todas las semanas. Durante el transcurso de esas noches donde abunda el alcohol, uno de ellos, un escritor, narra las historias que escribiría si tuviera el coraje de hacerlo: la del muchacho que abre un crematorio privado y se deleita con su habilidad para hostigar los cadáveres de funcionarios, mientras los cuerpos se desvanecen al ritmo de música occidental prohibida; y la de la actriz desconsolada que se suicida en público metiéndose en la boca de un tigre salvaje mientras su ex amante la mira con indiferencia. Son personajes extraordinarios y a la vez comunes, cuyas vidas son manejadas y castigadas por el destino y la política, que inspiran al escritor. "Quiero transformar sus vidas en obras de arte, aunque estoy seguro de que jamás se tomarán la molestia de leerlas", declara. Los libros de Ma Jian han sido prohibidos en varias oportunidades en China. Esta obra maestra satírica ofrece una mirada humorística, aunque profunda y perturbadora, sobre aquellos que luchan por sobrevivir en un sistema que controla cada uno de sus movimientos.
Ma Jian nació en Qingdao, China, en 1953. Antes de dedicarse por completo a la literatura, trabajó como aprendiz de relojero, pintor de carteles publicitarios y fotógrafo de una revista estatal. Vivió en Beijing y en Hong Kong, hasta que la entrega de esta última ciudad a los ingleses lo hizo mudarse a Alemania y, más tarde, a Londres. “Polvo rojo” (Seix Barral, 2006), la crónica de su viaje por territorio tibetano y que en 2002 le permitió obtener el Thomas Cook Travel Book Award, puede leerse como el reverso fáctico de “Saca la lengua”. En 2004 publicó “El escritor, las mujeres y el Partido”, titulada en inglés “The Noodle Maker”.