La odisea de vivir en Seúl en tres metros cuadrados

Los “goshiwon” o “goshitel” son pequeñas habitaciones que se alquilan desde 175 dólares por mes. Un fotógrafo surcoreano vivió allí más de tres años y quiso documentar su traumática experiencia en una muestra (foto).
Fuente: Mi Asia Pop - 2017-04-15
Un fotógrafo surcoreano decidió mostrar al mundo las condiciones de vida en los llamados “goshiwon”, las pequeñas habitaciones de entre tres y cinco metros cuadrados en las que las clases más humildes suelen alojarse. 

Estos alojamientos de bajo costo han existido durante casi medio siglo y su denominación tiene, por supuesto, una explicación: en sus comienzos se convirtieron en los lugares preferidos de los estudiantes universitarios que querían alejarse de todas las distracciones para rendir los “goshi”, los exámenes más difíciles de Corea. De ahí, el nombre de “goshiwon”.

En el interior, la habitación tiene básicamente un escritorio, una cama, y un armario con un baño común y cocina para todos los residentes. Hay también una versión más espaciosa pero espartana llamada “goshitel” (goshiwon + hotel), aunque a menudo mucha gente se refiere a ellos en forma indistinta. Aunque hay miles de “goshiwons” / “goshitels” dispersos por Corea del Sur, la mayoría de ellos se encuentra en Seúl.

Hoy en día, estos lugares se han convertido en una solución para miles de personas, teniendo en cuenta el alza en los valores de los alquileres en la capital del país. Muchos asalariados de bajos sueldos han comenzado a aprovechar sus precios, que oscilan entre 175 y 345 dólares al mes.
En sus comienzos se convirtieron en los lugares preferidos de los estudiantes universitarios que querían alejarse de todas las distracciones para rendir los “goshi”, los exámenes más difíciles de Corea. De ahí, el nombre de “goshiwon”.
Para algunos coreanos como el fotógrafo Sim Kyu-dong, de 29 años, no había otra opción que alojarse en un “goshitel”. Nacido en la ciudad de Gangneung, en la provincia de Gangwon, Sim se trasladó a Seúl para conseguir un trabajo pero fue incapaz de obtener los fondos para pagar un estudio fotográfico. En virtud de ello, debió vivir más de tres años en diferentes “goshitels”.

Primero se instaló en un “goshitel” en Sillim-dong, que en realidad era el refugio de pobres que no tenían lugar dónde dormir. Esta experiencia le sirvió de inspiración para convertir su experiencia “goshiwon” en un proyecto de fotografía. Durante los diez meses que vivió en el lugar, comenzó a documentar la vida de sus vecinos. 

En una entrevista traducida por Korea Expose, Sim compartió su experiencia y cómo las pobres condiciones de vida de la gente comenzaron a afectarlo profundamente.
En el interior, la habitación tiene básicamente un escritorio, una cama, y un armario con un baño común y cocina para todos los residentes. Hay también una versión más espaciosa pero espartana llamada “goshitel” (goshiwon + hotel).
“Al principio, tuve la noción clara de que vine aquí a tomar fotografías y que yo era diferente de todos los demás residentes. Pero viviendo allí y haciendo amistad con los residentes, sentí que me estaba convirtiendo en uno de ellos. Una noche estalló una pelea entre los residentes y los policías se acercaron. Me sorprendió cuando un oficial de mi edad me miró. A sus ojos, yo no era diferente, confesó Sim.

Descubrió que para muchos, vivir en un “goshitel” se había convertido en sinónimo de ser pobre, sobrecargado de trabajo y separado de la sociedad. No fue fácil y Sim sufrió la depresión en carne propia.

“Antes, yo era muy conservador y no simpatizaba mucho con personas sin techo o pobres. Pero vivir en el ´goshitel´ cambió mi percepción y mi pensamiento por completo. Hay gente que no puede evitarlo. Sus historias son demasiado complicadas para descartarlas”, concluyó .