A pesar de que todo Japón está hablando de la injusticia literaria que supone que Murakami no se haya llevado el Nobel de literatura tampoco este 2019, hay otra noticia destacable en el ámbito de las letras. Y es que acaban de encontrar en la casa de Motofuyu Okochi, un aristócrata de 72 años natural de Tokio, uno de los últimos manuscritos de la novela más antigua del mundo, y que completa el vacío narrativo de Genji Monogatari. Último manuscrito. Según han informado los expertos, se trataría del quinto capítulo ("Aobyoshibon") de la obra centenaria. Esto es noticia no solo porque se trata de nuevas páginas de la novela más antigua del mundo, sino también porque estas líneas completan una parte de la historia vital del protagonista hasta ahora desconocida. Los manuscritos que fueron encontrados por casualidad dentro de un baúl pasarán a disposición del gobierno japonés, ya que se trata de una parte muy importante de la herencia cultural japonesa.
Se trata de nuevas páginas de la novela más antigua del mundo, sino también porque estas líneas completan una parte de la historia vital del protagonista hasta ahora desconocida.
Primera novela. Genji Monogatari, además de ser un título pionero a nivel mundial, también está considerada la primera novela moderna de Japón. Escrita a principios del siglo XI por una novelista de nombre desconocido, cuenta la vida del príncipe Genji, el hijo de un emperador japonés que a través de su historia muestra la realidad de la corte de Kyoto hace más de 1.000 años. De hecho, tan importante es este título para la cultura japonesa que ha sido llevado a la gran pantalla siete veces. ¿Por qué es importante? No se producía un hallazgo de este tipo desde que en 1930 se encontraron los últimos manuscritos que pertenecían a otros cuatro capítulos de la novela. Sin embargo, las páginas recientemente encontradas en casa del señor Motofuyu Okochi dan respuesta a un vacío narrativo que hasta ahora nadie había podido resolver. En ellas la autora cuenta cómo su protagonista conoce a la que después será su futura mujer, Murasaki-no-ue. Hasta la fecha, esta explicación no existía y daba la sensación de que se producía una elipsis, es decir, que se obviaba esta parte de la trama.
Autores de todos los tiempos como Borges o Marguerite Yourcenar han reconocido que Genji Monogatari, a pesar de no ser tan popular a nivel internacional.
Murasaki Shikibu. Es el pseudónimo con el que se conoce a la autora de Genji Monogatari y que está formado por las palabras "Murasaki" (que hace referencia a la constancia en el ámbito de la poesía) y por "Shikibu" (el puesto que según los manuscritos se cree que tenía en la corte imperial). Es probable que viviera entre los siglos X y XI, en el Japón del periodo Henian, y que fuera hija de un gobernador de provincias muy vinculado a las élites de la época. Se quedó viuda muy joven y por ello pasó a formar parte de un círculo literario a cargo de la emperatriz de aquel momento. Título de referencia. La obra no solo destaca por ser la más antigua conocida hasta la fecha, sino también por la calidad de su relato. Autores de todos los tiempos como Borges o Marguerite Yourcenar han reconocido que Genji Monogatari, a pesar de no ser tan popular a nivel internacional, está a la altura de clásicos de la literatura universal como El Quijote y autores como Miguel de Cervantes. En sus más de 400 páginas se combinan historias de amor, tensiones y luchas de poder enmarcadas en el Japón imperial que tan lejos queda ya de la cultura actual.