Se llaman “hutongs” y, durante siglos, fueron la base de las ciudades chinas. En Beijing hay 25 callejones protegidos, que resisten la presión urbanística y preservan tradiciones previas a la Revolución Cultural.
Son utilizados para captar imágenes 3D de las zonas que requieren restauración, como la sección de Jiankou, al norte de Beijing. “Podemos inspeccionar áreas que son inaccesibles”, dijo Anil Nanduri, de la empresa Intel.
Se llaman “hutongs” y, durante siglos, fueron la base de las ciudades chinas. En Beijing hay 25 callejones protegidos, que resisten la presión urbanística y preservan tradiciones previas a la Revolución Cultural.
Como si fuera París, ahora es posible visitar el Museo del Louvre en la capital de los Emiratos Árabes Unidos. El contrato para poder usar la marca del Louvre ascendió a 1.159 millones de dólares.
La ciudad portuaria taiwanesa se ubicó en el quinto lugar del ranking de la revista Lonely Planet. “Hay que visitarla antes que se corra la voz”, aconsejan.
Es uno de los más populares de Mumbai y todos los días se convierte en el escenario de las más acaloradas, y divertidas, negociaciones de precios.
Un reconocido historiador indio respondió a los comentarios de un ministro que minimizó la importancia del monumento para la cultura del país. La historia de una de las Siete Maravillas del Mundo (ver video).
El portal TripAdvisor publicó el ranking de los sitios emblemáticos de Taiwán. En primer lugar volvió a ser elegido el rascacielos Taipei 101, seguido por el Templo Longshan y el Monumento a Chiang Kai-shek, entre otros.
El legendario monasterio atrae todos los días a miles de visitantes de China y de todo el mundo. Llegan para entrenar y estudiar nuevas técnicas. En la ciudad de Dengfeng hay entre 50 y 60 escuelas de artes marciales.
“¿Dónde está el dios que adoráis?. Me respondieron que estaba en el cielo como Chukwu. Entonces les pregunté quién era aquel al que habían dado muerte, el que había colgado en el palo de madera fuera de la misión. Me explicaron que era el hijo, pero que padre e hijo eran iguales. Fue entonces cuando me di cuenta de que el hombre blanco estaba loco”
(fragmento de la novela “La flor púrpura”)