La increíble historia de Michelle, una nena sudafricana que pasó de escribir a escondidas a convertirse en la inspiración de millones de niños. Su libro "Esperar las olas" ya está en venta en Amazon.

Las obras son interpretadas por artistas chinos que, luego, deben volver a trabajar al campo. No reciben subsidios y los escenarios muchas veces son improvisados, pero eso no les impide reivindicar las raíces de su cultura popular.


La increíble historia de Michelle, una nena sudafricana que pasó de escribir a escondidas a convertirse en la inspiración de millones de niños. Su libro "Esperar las olas" ya está en venta en Amazon.
La justicia consideró que era inconstitucional la prohibición que impedía a las mujeres ingresar al santuario de la mezquita Haji Ali Dargah, en Bombay. Según las tradiciones del islam, era un "pecado grave" su proximidad a la tumba de los santos.
La diseñadora boliviana Eliana Paco se ha convertido en una embajadora de la moda de la "chola paceña". El orgullo de defender las raíces culturales y el ejemplo de la vestimenta del presidente Evo Morales.
Somen Debnath ya viajó 137.900 kilómetros y su objetivo es visitar todos los países del mundo en 2020. Nacido en la localidad india de Basanti, se define como un ciudadano del mundo y planea construir una aldea global.
Tiene 53 años y conduce su Tuck Tuck por las calles de Nueva Delhi, en medio del tránsito más complicado y peligroso del planeta. Trabaja doce horas diarias para recaudar menos de 300 pesos argentinos. "Mucha bocina y mucho espejo", dice sobre su fórmula
Marie Wilcox es bisabuela aprendió a usar una computadora para crear un diccionario y evitar la extinción del idioma Wukchumni. El pueblo tuvo una población de 50 mil personas, pero ahora sólo quedan 200 que viven en el valle de San Joaquín, en California
Se llama Sara Curruchich, es guatemalteca y ya recorrió el mundo con su tour Matyox K'aslem (Gracias Vida). "Yo simplemente quiero seguir escribiendo canciones y trabajar con la música como medio para transformar”, afirma.
“¿Dónde está el dios que adoráis?. Me respondieron que estaba en el cielo como Chukwu. Entonces les pregunté quién era aquel al que habían dado muerte, el que había colgado en el palo de madera fuera de la misión. Me explicaron que era el hijo, pero que padre e hijo eran iguales. Fue entonces cuando me di cuenta de que el hombre blanco estaba loco”
(fragmento de la novela “La flor púrpura”)
